El presidente de la Diputación de Málaga, Francisco Salado, ha mantenido una reunión de trabajo con el comisionado para el Cambio Climático y Modelo Energético de la Junta de Andalucía, Juan Manuel Muñoz, y el director general de Energía de la Consejería de Hacienda y Financiación Europea, Manuel Larrasa.

El encuentro, celebrado de forma telemática, responde a la carta que envió el presidente a la Junta de Andalucía, al Ministerio para la Transición Ecológica y al presidente de la Federación Española de Municipios y Provincias, y ha tenido carácter monográfico sobre la proliferación de proyectos de parques solares en la provincia de Málaga.

Durante el mismo, los dos cargos de la Junta de Andalucía expusieron el estado actual de tramitación y solicitudes de parques solares en la provincia de Málaga y trasladaron a Salado garantías de que todos los proyectos tendrán que recibir informes favorables tanto de la Consejería de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible como de la Consejería de Fomento, Infraestructuras y Ordenación del Territorio.

Las previsiones del Gobierno andaluz son que muchos de los proyectos que han presentado las empresas en la provincia no superarán los trámites administrativos, y en la reunión se abundó en la necesidad de impulsar el cambio de modelo energético en Andalucía hacia uno más respetuoso con el medio ambiente y sin emisiones a la atmósfera. Estos proyectos supondrán la inversión de miles de millones de euros en la comunidad, que se convertirá en una de las regiones europeas líderes en producción de energías renovables.

El presidente de la Diputación trasladó la exigencia de los alcaldes afectados por estos parques solares de contar con más información y sobre su tramitación, algo a lo que se comprometieron ambos cargos autonómicos, y agradeció la “buena disposición” y “sensibilidad” de la Junta de Andalucía frente al “silencio y desprecio” del Gobierno central y del presidente de la FEMP, “que ni siquiera han respondido a nuestras cartas”.

“El Gobierno central ha provocado muchos problemas a las comunidades, a los ayuntamientos y a las propias empresas de energías renovables con una normativa precipitada y confusa, que sólo ha contribuido a crear una enorme burbuja y una gran incertidumbre tanto en el sector como entre los ayuntamientos y los vecinos afectados”, ha manifestado Salado. “Ahora intentan desviar la atención y la responsabilidad al resto de administraciones, cuando el problema, una vez más, lo han creado ellos”, ha añadido el presidente de la Diputación.