Las escuelas de verano atenderán a más de 6.700 menores en la lucha contra la pobreza infantil en Andalucía
La Consejería de Igualdad, Políticas Sociales y Conciliación ha activado ya el Programa de Escuelas de Verano, que dentro del marco de solidaridad y garantía alimentaria de Andalucía, permitirá proporcionar tres comidas diarias a menores de entre 3 y 15 años residentes en zonas desfavorecidas o que formen parte de familias en situación o riesgo de exclusión social.
El objetivo del programa es llegar a un sector de población muy vulnerable y garantizarle la alimentación en este periodo vacacional, permitiendo que mantengan una dieta equilibrada, saludable y suficiente al tiempo que participan en diversas actividades de ocio y educativas con otros niños y niñas, además de favorecer la conciliación de las familias con menores, especialmente en aquellos hogares que cuentan con una menor red de apoyos informales para ayudar en estos cuidados, ha destacado Rocío Ruíz, consejera de Igualdad, Políticas Sociales y Conciliación de la Junta de Andalucía.
Este año, el programa cuenta con un presupuesto superior al de la edición anterior, con un total de 4,65 millones de euros, lo que permitirá atender a más de 6.700 menores en las 114 escuelas repartidas por toda la comunidad así como diversificar las acciones socio educativas que se desarrollan en las escuelas y la mejora de la calidad de la atención prestada a las familias gracias al incremento del personal contratado y la reducción de la ratio de cada centro.
Entre las actividades relacionadas se plantean: el refuerzo de los contenidos curriculares con el aprendizaje de hábitos saludables referidos a la alimentación e higiene, así como actividades de ocio y tiempo libre tales como talleres deportivos, de reciclaje, de manualidades, teatro, playa o piscina.
Las Escuelas de Verano suponen además un entorno muy favorable para la detección de situaciones de riesgo y desprotección en los menores. "Se trata de un programa que es ejemplo, además, de colaboración entre todas las administraciones y también entre el sector público y privado: la Consejería de Educación y Deporte, los servicios sociales comunitarios que derivan a las familias, los ayuntamientos que ceden los colegios y las entidades privadas sin ánimo de lucro, a fin de proteger y atender a la infancia de nuestra tierra", ha apuntado Ruiz.