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Historia de Casabermeja

Diputación de Málaga
Casabermeja

Historia de Casabermeja

Casabermeja fue lugar de asentamientos para el ser humano desde tiempos ancestrales. El conjunto pictórico rupestre de Peñas de Cabrera y el enterramiento del Eneolítico de Monte Calvario, entre otros vestigios, constatan la presencia del hombre prehistórico en estas tierras. Posteriormente, los romanos ocuparon el municipio. De esa época son las ruinas de la Cotonilla, el alfar del Cerro Alcalde y las ruinas de la fuente de las Parras.

Del paso de los musulmanes por este territorio quedan algunas huellas, como los restos de una antigua muralla y la Torre Zambra, atalaya erigida en el siglo XV. No obstante, la población actual tiene su origen tras la conquista de Málaga por los Reyes Católicos. En los Repartimientos de Málaga de 1487, Rodrigo Caro, que recibe estas tierras, levanta un cortijo sobre las ruinas de una antigua alquería y en torno al cual se configura la futura población. Esta alquería, abandonada desde la conquista de Antequera en 1410, era una antigua “casa” de color bermejo (rojo) de la tierra con la que estaba hecha, y es por eso que Rodrigo Caro llama a este nuevo cortijo como el de la “Casabermeja”.

La fundación de esta nueva población por parte de la Corona reza en varios documentos firmados por Fernando el Católico en 1509 y Juana la Loca en 1529, hasta que el 26 de junio de 1550 Carlos I reitera los documentos anteriores y se hace efectiva la fundación de “el lugar de Casabermeja”. Transcurridos unos años, en 1633, los vecinos compran la jurisdicción a la Corona y Casabermeja se segrega de Málaga adquiriendo el título de villa.

El paso de la autovía A-45 junto a Casabermeja propició la expansión del pueblo, con la construcción de multitud de viviendas. Pese a ese desarrollo, la localidad conserva su originario sabor, sobre todo en el primitivo casco urbano. A sus calles estrechas se asoman las típicas casas encaladas y en ciertas fachadas aún permanecen las hornacinas con imágenes de santos y vírgenes para su veneración popular.