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Liebre ibérica (Lepus granatensis)

Diputación de Málaga
Liebre ibérica

Liebre ibérica (Lepus granatensis)

MediosTerrestre
Fenología
enefebmarabrmayjunjulagosepoctnovdic
Reproducción Celo Desmogue Hibernación
Fauna > Mamíferos

Identificación

Lagomorfo (animal con forma de liebre y dos pares de dientes incisivos de crecimiento continuo) de tamaño mayor que un conejo (longitud cabeza-cuerpo 44 a 50 cm; altura a la cruz 17 a 25 cm), pero más pequeño que su pariente la liebre europea. Pelaje dorsal canela o crema, con tonos rojizos; ventral y garganta de color blanco. Patas con una franja frontal blanca. Cola corta con el margen negro y el centro blanco. Orejas grandes (9 a 11 cm, más largas que las del conejo) y terminadas en una punta negra muy característica. Patas traseras más largas que las delanteras. Apenas hay dimorfismo sexual: las hembras son ligeramente más pequeñas que los machos.

Dónde vive

Especie endémica de la Península Ibérica, donde está presente sólo en la mitad centro y sur. Ligada a medios abiertos, cultivos, prados, estepas o zonas de matorral disperso y arbolado con escasa cobertura de sotobosque. Presente también en cultivos arbóreos como el olivar, en dehesas, humedales y zonas dunares. Suele preferir medios mixtos y en mosaico. 

Cómo vive

Animal herbívoro que se alimenta de hojas, tallos, flores, semillas y frutos. Su dieta varía estacionalmente, así como sus preferencias de hábitat. Animal solitario, aunque de noche y en hábitats óptimos pueden congregarse grupos de muchas liebres para alimentarse. Activa sobre todo durante la noche, puede recorrer hasta 7 km en busca de alimento. Suele usar zonas con mayor cobertura vegetal y visibilidad para encamarse durante sus periodos de reposo. Territorios de 0,1 a 3 km2.

Cómo se reproduce

Las liebres se pueden reproducir prácticamente todo el año. Tanto los machos como las hembras están sexualmente activos todos los meses, pudiendo haber partos en cualquier época del año. Suelen nacer dos crías por parto. El celo consiste en carreras de varios machos, unos tras de otros, para pelearse erguidos a dos patas por el control de las mejores zonas de pastos y las hembras que haya en ellas. Las hembras son capaces de quedar fecundadas estando ya embarazadas (superfetación), albergando dos embriones en diferente estado de desarrollo al mismo tiempo. A diferencia de los conejos, no construyen madrigueras subterráneas. Los lebratos nacen bajo la luz del sol y pasan sus primeros días de vida en el suelo, apenas mimetizados por su pelaje y la vegetación. Son capaces de moverse y tienen los ojos abiertos desde que nacen.

Dónde se ve en Málaga

Especie presente en toda la provincia, excepto en zonas alta montaña o muy forestales. Es muy abundante en la comarca de Antequera, la Vega del Genil, Campillos y Fuente de Piedra. En menor medida, está presente en las zonas cultivadas de la Serranía de Ronda y Vega del Guadalhorce. En la Gran Senda se puede observar, por ejemplo, en las etapas 12 a 18.

Curiosidades

¿Se pelean los machos por las hembras? Los sistemas de cortejo de los ciervos y ungulados en general suelen incluir enfrentamientos entre machos “a cornadas” por el control y dominio de grupos de hembras. Las liebres literalmente boxean entre sí (grupos de dos o tres machos enfrentados entre sí, erguidos a dos patas y a manotazos) por el control del territorio. El vencedor será el dueño de una buena zona de pasto en la que permitirá a las hembras presentes en esa zona alimentarse y con las que se reproducirá. En este caso la pelea no es por las hembras, al menos directamente.

Especies similares

Puede confundirse con el conejo. Éstos son de menor tamaño, tienen las orejas más cortas y no terminan en una punta negra. Las patas de los conejos tampoco muestran bandas blancas.

 

Más información

Diseñada para correr

Como usted habrá oído más de una vez si hay algo que caracteriza a la liebre es su capacidad para correr.
La especie está diseñada para ello. Sus patas, sus orejas, la forma del cuerpo... Todo indica que es una gran
corredora. Pero no corre por gusto. Es su medio de defensa ante los depredadores. ¿Sabe usted de donde
viene el nombre de liebre?. De Lepus la constelación de estrellas que es perseguida por Orión, el cazador.

Mejor quedarse en la cama

A diferencia de los conejos, las liebres no hacen huras ni se esconden bajo tierra. Confían en su mimetismo. Y, la verdad, es que lo consiguen. Es muy difícil descubrir una liebre agachada y quieta. Son animales nocturnos y el día lo pasan encamadas en pequeñas depresiones del terreno, sus camas. Son verdaderas artistas confundiéndose con la tierra y la vegetación. Solamente cuando el peligro es inminente se levantan y corren.

Reproducción a medida

La liebre se reproduce todo el año. Las hembras son capaces incluso de guardar esperma de los machos para fecundarse cuando les interesa. La necesidad la marca el alimento disponible y el clima. A las hembras las activa la lluvia y el crecimiento del pasto. A los machos el calorcito. Los lebratos nacen ya con prisa por vivir: con los ojos abiertos, cubiertos de pelo, capacidad de moverse y a cielo abierto. En esto también son distintas a los conejos, cuyos gazapos nacen con los ojos cerrados, desnudos, inmóviles y bajo tierra.

Boxeo entre olivos

El celo de la liebre es uno de los espectáculos más peculiares que puede usted contemplar en el campo. Los machos emprenden alocadas carreras persiguiéndose unos a otros en grupos. Se paran en los claros y se pelean a manotazos, como en un combate de boxeo. La lucha no es más que una expresión de egoísmo para transmitir los genes propios a la hembra que ejerce de espectadora de la pelea. ¿Sería usted igual de egoísta que las liebres?.

Etapas de la Gran Senda de Málaga en las que se pueden ver

Visible en las etapas 13, 14, 15, 16, 17, 18, 21, 22, 26, 27, 28, 29, 32, 33, 34 y 35.